El lunes 27 de enero, se inició la Escuela Internacional de Verano, de la Universidad de Panamá, bajo la organización de la Vicerrectoría de Extensión. El acto inaugural contó con la intervención del Magíster Denis Chávez, Vicerrector de Extensión, quien reconoció el apoyo de más de 15 universidades internacionales de la región latinoamericana, quienes están participando, con especialistas que impartirán seminarios, diplomados y talleres, así como presentación de una amplia gama de libros.
Con las palabras del Dr. Eduardo Flores, quien destacó públicamente el apoyo invaluable de la Universidad de Salamanca, la más antigua de Europa, quien fue una de las que respaldó la apertura en 1935, de la Universidad de Panamá, su participación, como universidad invitada en la versión 2020, de la Escuela Internacional de Verano, a través de la presencia, en Panamá, de su rector, el Dr. Ricardo Rivero Ortega.
El evento académico, de corte internacional contó con la asistencia de autoridades nacionales y representantes de las universidades del país. La Procuraduría de la Administración estuvo representada por la Magíster Florencia Ortega, subdirectora del Centro de Investigación y Capacitación.
La conferencia inaugural estuvo a cargo de la doctora Mónica Bruckmann, Investigadora de la Universidad Fluminense , Río de Janeiro, Brasil, quien habló sobre “Geopolítica del conocimiento”, haciendo un amplio recorrido por los avances de las ciencias, traducidos en desarrollo y producción de conocimiento para que la humanidad enfrente los profundos cambios que se están dando.
La expositora hizo una revisión histórica sobre los cambios de la reconfiguración geopolítica a nivel planetario, en las dimensiones financiera, política, económica, y su influencia en la producción del conocimiento y en lo que reconoce como las formas de pensar el desarrollo, modelo que algunos países están poniendo en práctica.
Al presentar el ranking de las mayores economías del mundo, y su proyección para el 2030, según datos del 2014 del Fondo Monetario Internacional, confirmados por el Banco Mundial, ya China pasó a ocupar el primer lugar, Estados Unidos baja a segundo lugar, seguido por India, en tercer lugar; después Japón, Alemania, Rusia, Brasil, Francia, Indonesia y el Reino Unido. Se prevé que China se mantendrá en el primer lugar, luego la India en segundo lugar; en tercer lugar, Estados Unidos y, Nigeria pasa a ocupar un lugar como una de las 10 mayores economías del mundo.
Estos cambios, no solo son económicos y financieros, sino que afectarán diferentes dimensiones de la vida, porque las economías desarrolladas están teniendo tasas de crecimiento bajas, mientras que países emergentes de Asia están subiendo sus tasas de crecimiento sobre el nivel del 6%, destacó la Dra. Bruckmann
Como un tema relevante, dijo que, a partir del 2012, de las 6.4 millones de personas que se forman en ciencia exactas e ingeniería, el 23.4% lo hicieron en China y 23% en India, es decir casi la mitad de los científicos e ingenieros que se forman en el planeta lo hace en países asiáticos. De acuerdo a la conferencista, lo que se observa es que se están reconfigurando las capacidades científicas y tecnológicas y con ello el desarrollo.
Para América Latina, una región productora de materias primas, y que durante los últimos cinco siglos ha sido dependiente de las economías desarrolladas, como exportadora de materias primas, la relación con China, desde una perspectiva estratégica presenta muevas oportunidades.
La nueva ruta de la seda, anunciada en el 2013, y que tiene una perspectiva contemporánea, impactará el futuro inmediato de América Latina; este es un gran desafío para la región, que ha tenido un proceso acelerado de desindustrialización.
Las rutas comerciales se van a intensificar entre Europa y Asia, a través de América Latina. En esta dimensión convergen dos espacios fundamentales: el Canal de Panamá y el Canal de Nicaragua, que es un proyecto paralizado, pero en cualquier momento se va a retomar. América Central se convertirá en una zona geopolíticamente estratégica.